Para una empresa el proceso de planeación consiste en el seguimiento de pasos que por sentido común se deben realizar para llegar al logro de objetivos.
1. Detección de las necesidades/ atención a las oportunidades:
Siendo el paso número uno, este será nuestro punto de partida para el plan a elaborar. Consiste en realizar un examen introductorio con el fin de saber en que situación se encuentra la empresa, y en cual se encontrará en base a sus puntos fuertes y débiles para detectar oportunidades que se podrían presentar en un futuro así como comprender que necesidades se requieren cubrir.
2. Establecimiento de objetivos:
Consiste en crear los resultados o metas a las que toda la empresa desea llegar, y no solo para la empresa en si, sino también para cada unidad de trabajo subordinado, es decir, para cada área, tanto para el corto como para el largo plazo.
3. Desarrollo/ consideración de premisas:
Sabemos que al elaborar un plan, estamos obligatoriamente tomando en cuenta que el futuro es incierto. Por lo cual tenemos que considerar premisas, estas son ideas que se dan como verdaderas y que se utilizan para dar un razonamiento. Estas se establecen, se difunden y se llega a un acuerdo para utilizarlas. Algunos ejemplos son: pronósticos, políticas básicas o ya existentes.
4. Determinación de cursos alternativos de acción:
Es importante desarrollar una serie de cursos de acción, porque quizá puede salir uno mejor que otro que nos llevarán a alcanzar el objetivo de la mejor manera. Este paso consiste en buscar esos planes o (cursos alternativos de acción).
5. Evaluación de cursos alternativos:
¿Pero que tan eficaces y eficientes serán esos cursos de acción?. Bueno, se necesita evaluar y ponderar cada uno de ellos, haciendo uso de premisas y las metas previamente establecidas para tener claro que es lo que queremos lograr.
6. Selección de un curso de acción:
Sencillamente elegimos uno de ellos, por obvias razones el que ponderamos más alto, y en base a ese plan podremos partir para la toma de decisiones.
7. Formulación de planes derivados:
¿Y si no funciona ese plan, que pasará?. Por eso se elabora un plan derivado, o mejor conocido como “plan B”, y no solo el B si no también el C, D, todos los que se puedan para que no corra en riesgo el éxito de la empresa. Estos planes apoyarán o respaldarán al plan básico.
8. Conversión de planes a través del presupuesto:
En este último paso convertiremos el plan en un documento numérico llamado presupuesto, que plasme las cantidades que se necesitan para poder llevarlo a cabo.
Referencia Bibliográfica
ITSON. (s/f). Proceso de Planeación. Junio 31, 2017, de ITSON Sitio web: http://biblioteca.itson.mx/oa/ciencias_administrativa/oa7/planeacion_naturaleza_proyecto/p5.htm